Recorrer el globo terrestre en un solo día y descubrir los mejores atractivos de cada país es posible con FITUR: estuvimos allí para contártelo todo.
1. La vuelta al mundo más barata… sin pasaporte ni visado
El mundo concentrado en Madrid. América, Europa, Oriente Próximo, África, Asia y el Pacífico se dan la mano en FITUR, el evento multicultural del año donde 165 países dan a conocer los rincones más bellos de sus regiones.
Con 250.000 visitantes y casi 10.000 empresas, FITUR es la gran oportunidad para acercarte a tu país, descubrir otros rincones del mundo, probar comidas exquisitas y disfrutar de las curiosidades que solamente pueden ocurrir en unos pabellones donde conviven durante unos días la causa limeña con el fufú de Ghana y el chocolate belga.
La 38ª edición de la Feria Internacional del Turismo, se halla al noreste de la ciudad en el recinto ferial IFEMA -situada en el distrito de Barajas y se accede vía la línea 8 de Metro, varias líneas de autobuses o fácilmente desde las autopistas M-40 y M-11 que tienen salidas directas.
El precio es muy asequible, 10€ para una entrada individual; también disponen de un pack familiar de 25€ para 4 entradas, muy conveniente.
2. Una fiesta inigualable
Empezamos nuestro recorrido por el pabellón de América y nos quedamos impactados por el espectáculo se ofrecía frente a nuestros ojos: un festival de colores, música y aromas, una energía vibrante se desprendía de cada rincón.
Cada país y cada cultura esta animando el ambiente con coloridas instalaciones en las que ofrecen productos típicos del continente. Espectáculos, degustaciones, conciertos y actividades como la Quedada multitudinarias de viajeros o un taller de fotografía son algunas de las numerosas opciones que ofrecían los distintos stands.
¿Cual nos gustó más? Imposible elección… pero aquí te contamos más:
¡Que el ritmo no pare! El Pabellón de América
Iniciamos nuestra vuelta por el Stand de México al ritmo de una ranchera y acompañados por unos fantásticos mariachis, después de tomar rumbo al Stand de Perú donde bailamos un desenfrenado huainito, acompañado de un delicioso Pisco Maracuyá. ¡Que rico!
Seguimos con un divertidísimo merengue en el Stand de República Dominicana, una demostración de Hip Hop/Reggaetón sobre el ritmo de J.Balvin en el Stand de Colombia “Tierra de Sabrosura”, baile y distribución de preciosos sombreros coloridos en el Stand de Nicaragua.
Tanta fiesta nos abrió el apetito por lo que nos fuimos de visita al Stand de Ecuador donde Pablo Maldonado tenía preparado una exquisita elaboración de higos con queso para deleitar nuestros paladares; aprovechamos para disfrutar de las activaciones interactivas, fotografías en la pared de rosas, columpio fin del mundo y fotobooth del volcán Cotopaxi.
Pasamos por el stand de Guatemala donde probamos su famoso Zacapa 23 y saludamos a la diosa maya del amor, Ixchel; antes de dirigirnos a –Brasil – donde nos dejamos llevar por el ritmo de su Batucada y a Cuba, destino que apuesta fuerte por el turismo en 2018 y fue premiado como «el país más seguro» para viajar.
Acabamos el recorrido Americano disfrutando del Stand de Costa Rica que llama la atención por su vegetación exuberante y unas actividades artesanales y de tradiciones : el colorido y único arte de pintar carretas de la zona Sarchí de la provincia de Alajuela, la activación de bailes populares propios de Costa Rica como el “swing criollo”, la degustación de uno de los mejores cafés del mundo, el café costarricense, o así como productos de la gastronomía “tica” como son las cajetas, copos, algodón de azúcar o bizcochos.
Místico y salvaje, el Pabellón de Asia y África
India ha sido el país invitado en esta 38 edición y se ha esmerado en crear unos espacios atractivos y llenos de opciones tan diversas como el propio país.
Así lo demuestra con uno los ‘photocalls’ más originales de la feria: un ‘ketuvallama’, uno de los barcos-casa que recorren las aguas interiores de Kerala, al sur del país. La cabecera del barco ha sido desmontada en 35 piezas y transportada hasta Madrid desde India para ser montada expresamente en Fitur. ¡Increíble!
Diversión asegurada con los stands de Japón y Tokio, que ofrecían la posibilidad de jugar al Tosenkyo, un juego tradicional japonés de puntería en el que hay que intentar derribar tarjetas tirando, a unos metros de distancia, un abanico abierto.
Y frente a los kimonos y el Fuji, se abría ante nuestros ojos el vistoso stand de Corea donde probamos el simulador de realidad virtual que permite experimentar una de las pruebas de saltos de esquí. ¡Las mascotas oficiales de Pyeongchang 2018, Soohorang y Bandabi, son testigos del vértigo hemos tenido!! Powwww!!!!
En cuanto a África, era fácilmente localizable por la imponente recreación del templo de Abu Simbel, en Egipto. Marruecos, que recreo sus bazares clásicos nos llamó la atención por su misterio y cercanía.
Recorrimos la parte subsahariana del continente, representada, entre otros, por Zimbabue, Camerún o Senegal -bailando al son de su djumbe -, Botsuana, Cabo Verde y Ghana donde probamos sus diversos manjares. ¡Riquísimo!
Carisma, Mitos y Leyendas, el Pabellón de Oriente Próximo y Europa
Portugal llego a la feria con el título de ‘mejor destino el mundo’ y nos deleitó con su gastronomía y sus vinos.
En el stand de Rumania asistimos a bailes tradicionales además de charlar con sus representantes sobre su increíble oferta cultural. Castillos, arquitectura medieval, mitos, leyendas y mucho más. Descubrimos también a Bulgaria, otro país encantador, situado en el corazón de los Balcanes.
Después de ese momento cultura, vuelta a la diversión en el stand de Bélgica donde nos tomamos varias fotos con… ¡los pitufos! Además de llevarte tu foto impresa al instante, podías participar en un sorteo para ganar un viaje a Bruselas. Qué bueno, ¿no?
Como una imagen valen más que mil palabras, aquí os dejamos unas pruebas de lo chévere que lo pasamos:
3. Regalos y sorteos
FITUR es día de fiesta y también el día del regalito por cortesía de cada país o región. En algunos stands regalaban llaveros, boligrafos, figuritas de artesanía, stickers…
Vimos a verdaderos profesionales del evento con bolsas y maletas para transportarlos y con técnica. Marco es uno de ellos y nos lo conto todo:
“Primero pedir información del lugar y luego el regalito. Suele ser más efectivo para conseguirlo cuando no los dan a todo el mundo. Pero hay que ser rápido… el que se topa con los sombreros que están ofreciendo en el puesto de Nicaragua no llegará a tiempo a los guantes que sacan con cuentagotas los empleados de Iberia, al otro lado del recinto, o a los pines de Guatemala. Y lo que tardas en pensar si los necesitas es más de lo que tardan en desaparecer de las manos de las azafatas.
Si te encuentras con otro visitante que porta algún objeto que te llama la atención, no tengas corte en preguntar dónde lo ha conseguido para hacer tu lo mismo. También es bueno acércate a los stands que celebren el día de la comunidad, provincia… ya que acuden políticos y medios de comunicación y ante la prensa suelen mostrarse muy generosos en tapas, bebidas y regalillos. En cuanto a las empresas turísticas, muchas sortean viajes.”
¿Qué más se puede pedir?
4. Estar a la última y probar nuevas tecnologías
En una feria marcada por la irrupción de la tecnología en la promoción turística, las experiencias de realidad virtual han sido una gran atracción; esas gafas conquistaron nuestras retinas. Pude recordar las calles de Nueva York, sentirme realmente lejos de todo, en la hamaca de una isla paradisíaca y hasta recorrer parte del camino de Santiago. ¡Rompedor!
Ttambién nos llamaron la atención el “Viaje en el Tiempo”, que permitía acceder a todas las sesiones de la feria en tiempo real y diferido; el “Traductor”, un intérprete multilingüe en tiempo real accesible para todos los asistentes a la feria; y “Teleport”, un servicio de teleconferencia inmersiva en tres dimensiones.
El objetivo último de todas estas ideas: aumentar la interactividad de los visitantes, facilitar la actividad de los expositores y servir de punta de lanza a futuros despliegues de 5G e hiperconectividad en otras industrias más allá del turismo.
Y es que algún día, veremos recepcionistas androides como en los hoteles Yotel de Nueva York o Henn-na de Nagasaki que se ocuparán de todo. Increíble, ¿no?
5. ¡Enriquecerte y abrirte al mundo!
FITUR, une culturas. El mundo en FITUR estaba abierto para que de esta manera podamos informarnos y conocer otras culturas. Un mundo sin fronteras.
Pudimos “callejear” entre los stands, primero pasando de México a Perú y luego atravesando República Dominicana hasta llegar a Colombia: todos desearíamos que viajar fuera así de fácil y asequible.
Es una cita para quienes sienten pasión por viajar o para los inmigrantes/expatriados que quieren sentirse más cerca de sus países… nos proporciona, aromas, sentidos, sensaciones, formación y mucha curiosidad.
A fin de cuentas, he dado una vuelta al mundo en tan solo unas 8 horas: he recargado las pilas tomando un poco de sol en las Maldivas, he recordado viajes pasados charlando con unos guatemaltecos, he sentido nostalgia recordando destinos que me embrujaron como India y Sri Lanka, he disfrutado de diferentes bailes en Perú, en República Dominicana y en Costa Rica, practicado mi francés conversando con amigos de Senegal y Costa de Marfil y recorrido las calles de Nueva York.
¡Una verdadera gozada!